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Kumelen Co, una aventura para descubrir el alma del Rio Colorado

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ARGENTINA. 𝘱𝘰𝘳 @𝘭𝘦𝘢𝘯𝘥𝘳𝘰𝘷𝘦𝘴𝘤𝘰

La Pampa es una provincia que tiene un litoral fluvial muy importante. La costa del río Colorado cruza todo el sur conformando el límite natural con la provincia de Río Negro. En su recorrido baña a pueblos que tienen una intensa vida acuática; el cauce además permite el riego de extensas superficies de tierra donde se concentra la producción de vinos. Uno de estos poblados es La Adela, al sudeste, frente a Río Colorado, localidad rionegrina con la que forma una comarca con una relación social, económica y cultural unificada.

“Nosotros queremos que la gente conozca este río”, afirma Dario Schiebelbein, a cargo de Kumelén Co junto a Ceferino Cartagena, un proyecto turístico que propone distintos recorridos navegando en #kayak el río. Hace diez años que persiguen un objetivo: mostrar la vida fluvial de una provincia asociada al #desierto. Su trabajo es pionero y han logrado lo que se propusieron. “La gente queda fascinada”, cuenta Schiebelbein. Enseguida aclara: “No proponemos una actividad deportiva, queremos que liberes tus sentidos”. La experiencia es sentir en intima #libertad y #serenidad, el alma de un #río que es una bendición para estas tierras curtidas.

“Los sentidos se cierran en la ciudad para no estar sobreexpuestos. La nuestra es una experiencia sensorial”, dice Schiebelbein. El lugar desde donde salen las excursiones es un portal a una postal de un pequeño #paraíso. Debajo de las #bardas, sobre la costa y frente al río, un muelle, algunas sillas y la eterna brisa fluvial que nace lejos y que este traslada desde su nacimiento en la cordillera mendocina. “El río tiene una vida propia, nunca está igual”, sostiene Schiebelbein.

“Hacemos flotaciones”, afirma Schiebelbein. Así llama a las navegaciones que hacen. “Flotamos”, recalca. “El río está llegando a su fin en esta ubicación, es calmo, limpio y no tiene amenazas”, agrega Schiebelbein. No es necesario tener conocimiento previo de navegación, la experiencia es de completa integración con el agua. “Sabemos la hora de inicio, pero nunca sabemos la de llegada, se pierde la noción del tiempo”, cuenta. La salida se hace desde La Adela, y una vez en el agua, la realidad es otra. Se ve la comarca desde una perspectiva única.

“Pedimos que cierren los ojos, y toquen el agua con las manos, que la sientan y que se dejen llevar por las aves”, sostiene Schiebelbein. La diversidad de la fauna es maravillosa. La situación es inolvidable y privilegiada, en la costa derecha está La Pampa, en la izquierda Río Negro. “Para nosotros no existen las fronteras ni las provincias, el río nos une, no nos separa”, aclara Schiebelbein. La Comarca funciona como un solo pueblo. Las bondades son inmensas. Las chacras que producen fruta de primera calidad se pueden visitar. “Podes cosechar vos mismo y llevarte esa fruta para comerla”, describe una de las hipótesis de la felicidad.

Tienen recorridos pensados para todas las edades y estados físicos.

Bodega Trina: El recorrido inicia en el muelle de la bodega Trina, es una flotada muy tranquila por el río Colorado, recorriendo el sector urbano donde se aprecian los bellos parques y costaneras que tiene la localidad, pasando por debajo los puentes que unen la provincia de la Pampa y Río Negro hasta llegar al predio de Kumelen Co. Duración 1 hora a hora y media. Distancia 5 km en kayak.

El Viñedo: La travesía arranca con un paseo de 25 km en Jeep por la colonia Reig apreciando la hermosa vista que tienen las chacras productivas, hasta llegar el campo El Viñedo, aquí se inicia la flotada por el río, parando en algunas playas para tomar mate, pero también para bañarse en medio de un entorno natural idílico. Luego se retoma la flotada hasta la Bocatoma, la primera represa de riego que originó las huertas frutihortícolas de la Comarca. La duración es de 4 horas, aunque depende de las ganas de cada grupo.

Eco Camping Yapay Peñi: Es una flotada por el río de 20 kilómetros hasta la Colonia Julia Etcharren donde se llega a un lugar mágico, el Eco Camping Yapay Peñi, en el recorrido se cruzan por varias islas completando un paisaje típico de la comarca. Duración: 5 horas.

Luz de luna: Todo sucede en las noches con luna llena. La aventura comienza con un paseo en jeep de 12 kilómetros hasta la Colonia Reig, y desde allí se continúa hasta el Puerto Kuyen Ñuque donde se inicia la flotada nocturna de 12 kilómetros. Duración: 3 horas.

Acampe: Es la más larga, se trata de hacer una travesía de 90 kilómetros en el río. Se lleva a los participantes hasta el Salto Andersen, río arriba y desde allí se inicia la flotada que incluye acampe en playas escondidas y solitarias del río. Duración: dos días.

“Cuando arrancamos estábamos solos, con el tiempo se fueron sumando más prestadores”, reconoce Schiebelbein. La búsqueda de experiencias distintas y alternativas, el deseo de vivir momentos inolvidables en contacto con la naturaleza hicieron que la comarca de a poco se transformara en un destino turístico. “Acá no hay nada que hacer”, confiesa Schiebelbein. Esa fue la frase que acompañó durante décadas a la comarca. “Nosotros comenzamos a trabajar para decirles a los vecinos que sí, que había mucho por hacer y descubrir”, enfatiza. Gran parte de sus clientes son los propios habitantes de la comarca y pampeanos de Santa Rosa que vienen a conocer su propio territorio.

La Adela es una bella localidad rodeada de bardas y monte pampeano. Se desarrolla sobre la costa del río, goza de esta manera de un clima benévolo. Debe su nombre a un antiguo almacén de ramos generales que existió a fines de 1890 frente al actual puente ferroviario. Lo atendía Adela, la esposa del propietario. En aquellos años, a un costado del almacén estaba la balsa que fue durante mucho tiempo el único medio para comunicar ambas costas y permitía que personas, carros y hacienda cruzasen.

Recién en 1909 se inauguró el puente carretero por donde pasaba la antigua ruta nacional 22. Hasta 1962 fue la única vía de comunicación entre el norte del país con la Patagonia en esta zona. “Siempre fuimos un lugar de paso, pero ahora los viajeros comienzan a quedarse”, destaca Schiebelbein. La costanera del río Colorado es un remanso de paz por descubrir.

Desde Check In America, agradecemos a Leandro Vesco @𝘭𝘦𝘢𝘯𝘥𝘳𝘰𝘷𝘦𝘴𝘤𝘰

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